Ideal para los que buscan confort y un buen ambiente

El hotel tiene una decoración minimalista que me hizo sentir muy a gusto, y cada vez que entraba a la habitación era como si estuviera en casa. También, había un bar en el último piso con snacks disponibles las 24 horas, lo que fue perfecto después de un día agotador.

No fue barato, pero valió la pena por la calidad.

el desayuno está súper bien, te lo hacen al momento y el lounge en el último piso con snacks y bebidas 24/7 es lo mejor. el staff es muy amable, hablan español y siempre están dispuestos a ayudar. la ubicación es increíble, a pasos de alexanderplatz y con el metro cerquita.

Snacks y vistas sorprendentes

La experiencia fue magnífica, especialmente al despertarme con el olor de los croissants recién horneados. La habitación era espaciosa, y la ducha, sencillamente espectacular. El personal, siempre sonriente, me hizo sentir como en casa.

Un pequeño inconveniente fue que el servicio de desayuno fue algo lento en las mañanas. Sin embargo, la calidad de la comida lo compensaba todo. La ventilación en la habitación podría mejorar un poco.

La habitación tenía un ventanal al exterior en el baño que ofrecía unas vistas espectaculares y era muy especial.

El desayuno no cumplió con las expectativas en cuanto a la variedad. podría mejorarse.

1. Habitaciones amplias
2. Ducha increíble
3. Snacks las 24 horas

1. Desayuno limitado
2. Servicio de desayuno lento

El hotel tiene una ubicación excelente, cerca de estaciones de metro y con habitaciones amplias y cómodas. La variedad de tentempiés disponibles las 24 horas fue un gran acierto. Sin embargo, la ventilación de la habitación podría mejorar y el agua de la ducha tardaba en calentar.

Disfruté mucho mi estadía con amigos. El hotel tiene un diseño original y un lounge en la séptima planta con snacks y bebidas 24 horas. Está súper bien ubicado, cerca de Alexanderplatz y del barrio judío. El desayuno es buenísimo y puedes pedirlo al momento. ¡Recomendadísimo!

las camas son enormes y muy cómodas, pero el desayuno no es tan variado.

Una experiencia fabulosa!

Estuve 2 noches y la verdad, el servicio fue de 10. Todos los días tenían snacks y bebidas gratis, y el desayuno era buenísimo, con opciones recién preparadas. La habitación era enorme, perfecta para relajarse. Aunque a veces pasamos un poco de frío, la experiencia general fue increíble.

Tuve una estancia agradable en Casa Camper. Las habitaciones son amplias y muy cómodas, con un diseño único. La ducha, además de ser amplia, tenía unas vistas sorprendentes. El desayuno, aunque muy bueno, me habría encantado que ofreciera más variedad. Sin duda, un buen lugar para descansar en Berlín.

La habitación era amplia y perfecta para nuestra familia. Todos disfrutamos del servicio de desayuno delicioso y de los snacks 24 horas. La ubicación es inmejorable, puedes explorar Berlín fácilmente y además es un lugar sin ruidos exteriores.

A mis hijos les habría encantado que hubiera un área de juegos dedicada.

La habitación era amplia, aunque a veces pasamos frío.

Ubicación inmejorable cerca de todo, habitaciones amplias y súper cómodas. El desayuno buenísimo, hecho al momento. El lounge en la séptima es ideal para reponer energías después de caminar. El personal muy amable y siempre dispuesto a ayudar, me sentí como en casa.

Ubicación espectacular, justo al ladito de Alexanderplatz. Habitación amplia y bien equipada, con un ambiente muy acogedor. El desayuno a la carta, delicioso y hecho al momento. Aunque el servicio del desayuno puede ser un poco lento, el personal es muy amable y siempre dispuesto a ayudar.

Habitación amplia y cómoda con ducha increíble. La atención del personal excelente. No había suficiente luz en la habitación, lo que a veces era incómodo. El hotel tiene bicicletas en alquiler, ideal para explorar la ciudad.